CRÍTICAS
..."Utilizando una gama de color que en ocasiones resulta expresionista, consigue crear ese espacio ilusionista cargado de literatura que a veces nos podría recordar obras de Frida Kahlo. [...] Nos encontramos ante unas creaciones pictóricas producto del análisis y la introspección. El gusto por individualizar cada personaje hace que a cada uno lo ubique en un ámbito diferente y adecuado a su psicología..." Jesús Cámara.
"Una figuración narrativa". Texto de catálogo.
Centro Municipal de las Artes. Alcorcón (Madrid, España), noviembre de 1996.
..."Quizá la clave de la ambientación de sus obras haya que encontrarla en su otra actividad profesional: el arte dramático. Sus personajes se expresan o callan condicionados por la escenografía que les envuelve, incluso las paredes hablan en ausencia de ellos. [...] Hay que buscar sus admiraciones y antecedentes en Henry Rousseau, por su capacidad de contar las cosas con todo tipo de detalles y, sobre todo, en los pintores alemanes de la nueva objetividad. Otto Dix, Grosz... ya que sus personajes están llenos de sensibilidad, de sufrimiento, de inquietud, de seguridad e inseguridad, de madurez, de carácter... de vida en definitiva." Fernando Fullea.
"La pintura de Hilda Fuchs o la serenidad inquietante"
en El Punto. Periódico semanal de las artes, España, nº 47.
..."Decía Ortega que cada uno era su propio yo y la circunstancia que le rodeaba. Hilda Fuchs es fiel a ese principio filosófico y lo aplica con generosidad y luz, luz que habita en todas sus obras y les confiere un impulso vital, casi una propia ley de la dinámica. [...] Mirar sus cuadros es asomarse a una urbe interior en la que los paisajes se multiplican por la historia misma de la pintura. Lava en fusión debajo de la aparente frialdad de la corteza. [...] Malcolm Lowry convirtió la crónica de un volcán en el retrato de una desesperación, Hilda Fuchs lo ha convertido en pintura." Raúl Heras.
"Crónica de las Mujeres". Texto de catálogo.
Galería Altalene. Madrid (España), 1999.
"Hilda Fuchs siempre se parecerá a una de esas niñas de cuento anglosajón -naturalmente perverso- que suelen ser terriblemente dulces, tremendamente inocentes y furiosamente al tanto de lo que es y no es la vida. [...] Dice que es actriz y no tengo más remedio que creerla porque la veo correr de una producción americana, de esas que todavía se ruedan en Almería, al rodaje de algún programa televisivo. [...] Actriz, de acuerdo. Pero lo que la Fuchs -Fuchsi para los amigos- es de verdad, aquí y donde sea, no suele darse entre las actrices. Y si se da, se lo callan. Como se lo calla ella, porque Fuchs es poeta. No poetisa, poeta. Poeta de cuerpo entero. [...] He leído sus cosas. Hay perlas de una gran tersura. Moralista y un poco profeta, como casi todos los poetas. [...] La Fuchs -un día la llamarán así- triunfará, seguro, porque como todas las mujeres pequeñas, es de hierro. [...]. Pinta unos cuadros entre surrealistas y abstractos, los tonos pardos son curiosamente castellanos- cuadros de poeta cansado de romperse los dedos en las teclas de la Hermes portátil, viejo instrumento de trabajo con el que juega, con aires de pianista..." José Luis de Villalonga.
"Tirando a dar"
en revista Interviú, número 341. España, 1982.
"Juntas o por separado. Mujeres siempre solas. Esperando. Detenidas en medio de un pensamiento. [...] Naturaleza exuberante. Como una eterna añoranza gauguiniana de esos otros mares del Sur que habitan en Latinoamérica. Los guiños y remembranzas, quizás inconscientes, no se detienen aquí. Las calas de Frida Kahlo van dando cuenta también de un pasado transcurrido en otras latitudes y los coqueteos de art decó se dejan en borlones y macizos candelabros. Pero la soledad, la sensación de irreversible inevitabilidad es deudora únicamente de David Hockney. [...] Hilda va creando diversos ambientes, mostrando la casa y los personajes que en ella habitan con crudeza cinematográfica pero con la delicadeza de una mujer que, acostumbrada a recibir en casa, va mostrando los salones a los invitados: al espectador." Jaime Barrientos.
"Interiores". Texto de catálogo.
Centro Municipal de las Artes. Alcorcón (Madrid, España), noviembre de 1996.
"Hilda Fuchs lleva un auténtico "cóctel Molotov" en sus senos. De padre austriaco, madre suiza y nacida en Argentina, Hilda se encuentra a gusto en España. Actualmente trabaja como redactora en el programa de TVE "Punto de Encuentro" dirigido por Pedro Macía. Único espacio que se emite en Latinoamérica y por la cadena norteamericana SIN. [...] En televisión ha trabajado también como actriz en programas así como en teatro y cine. [...] Su otro gran amor es la pintura: "un tema constante en mi obra es la mujer, ella suele ser siempre el motivo principal de mis cuadros. El arte es la única constante en mi vida porque no podría vivir sin él". [...] Esta polifacética mujer a la que le gustan con pasión los boleros y siente especial atracción hacia los gatos, también escribe poesía, aunque de manera intimista y celosa de sus sentimientos "porque lo que yo escribo es solamente para mí". Ana Marcos.
"Hilda Fuchs, de la pintura a la pantalla"
en Diario 16. España, número 3.200, abril de 1986.
..."Cuando Teddy llegó a la sala de arte Altalene, Hilda lo recibió con sorpresa y después de un beso ritual, flexionó la voz con la gracia y el duende que sólo disponen algunas mujeres que han cultivado con mesura y buen criterio el arte de la seducción verbal. Dijo, alargando las vocales, como una ola desprendida del océano: -"¡Oh, querido! ¡Qué bueno que viniste!"- El otro, ligeramente desconcertado, contesto: -"El arte y yo siempre viajamos juntos, señora, al unísono"- [...] Se detuvo ante una de las pinturas más valoradas por la crítica, "Una copa en casa de Leopold", en la que se reían dos mujeres, un hombre y un candelabro. El trío parecía distanciado, estático. Teddy se quedó por espacio de varios minutos, hasta que un experto convino en aclararle: -"Efectivamente, amigo. Es una de las mejores pinturas de la exposición. La verdad es que Hilda es una auténtica revelación" -" No estoy de acuerdo- explicó Teddy - Hilda es mucho más que eso-". Dionisio Giménez.
"Teddy e Hilda Fuchs",
Las aventuras de Teddy Menéndez. Capítulo XII,
en revista Movilfonía. España, número 13, octubre de 1999.
..."Hay muchos artistas que exponen su obra de vanguardia dentro o fuera de los circuitos tradicionales. Uno de estos ejemplos nos lo proporciona la pintora Hilda Fuchs. [...] Esta pintora participó en un proyecto tan poco habitual como el de integración del arte de vanguardia en Castilla, a través de murales como el de Escariche, en Guadalajara, aportando una nota de color a través de un acrílico, a lo que quizá no sería más que un olvidado callejón de un pueblo de fríos inviernos y abrasadores veranos. Los "muralistas de Escariche", como Hilda Fuchs, han realizado también una exposición itinerante por distintos pueblos alcarreños, muy lejos de los circuitos convencionales de la pintura..." Manuel Espín.
"Fuchs, taberna y mural"
en El Nuevo Lunes. España, febrero de 1989.
..."Escenifica cada obra en distintos escenarios, en estructuras creadas para acompañar a la mujer y no al revés. Configura una creación pictórica claramente popera, sin que por ello sea predominantemente irónica, simbólica o ácida. [...] Hilda Fuchs recupera la figura con connotaciones humanas de la mujer, sintiéndola en el lugar que le corresponde por inteligencia y logros. No tiene nada que ver con la idealización que hacen de la figura de la mujer algunos pintores masculinos. [...] Su producción de obra gráfica se fundamente en la descripción de la iconicidad, en el desarrollo de temática que oscilan desde las Pistas de Nazca, pasando por los Megalitos de Stonehenge, por la Cosmogonía, por alegorías irónicas y ácidas de ciertos personajes surgidos del cómic y la estética, por la ciudad y el agua".
Juan Lluis Montané.
(Asociación Internacional de Críticos de Arte).
"Hilda, la mujer y el pop"
en Guía de Arte 04. Plecs d'Art. España.
"Hay cuadros que son espejos, pero no los del tópico, esos-que-reflejan-la-realidad, sino los de Alicia, el otro lado, o los de Ofelia entre nenúfares, o las ondas de Narciso sumergido. Hay cuadros, como los de Hilda Fuchs, que son espejos que miran y nos devuelven fuguras, cuadros, baldosas, números, plantas, velas, flores, algún reloj. Algún reloj en un tiempo cuyo tránsito se ha detenido pero que vibra gracias al calor y construye un paisajel. ¿Ilusorio paisaje? No: atmósfera de meditación, seno, sueño, recinto quieto y en movimiento a la vez. Que resplandece en el gesto, en esas manos que, sostenidas o apoyadas en el regazo o a punto de cruzarse o esbozando la caricia en el pelo, seguimos esperando, al otro lado del cuadro, para que la realidad pintada tiña de otro color el mundo de los muertos a mansalva." Mario Merlino.
"Hay cuadros que son espejos". Texto de catálogo Diversidad.
Bacchanalia. Madrid (España), noviembre de 2006.
[VER APARICIONES EN LOS MEDIOS]
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